Hace unos días volvió la polémica a Twitter cuando Filmin decidió añadir en su catálogo la saga al completo de Torrente. Esto fue un detonante más que justificado para que los más snob de la plataforma saltasen encolerizados con el catálogo que ofrece la plataforma. Parece que muchos olvidan que Filmin tiene una magnifica y extensa colección en el que se incluyen tanto la maravillosa “La batalla de los simios gigantes” del padre de Godzilla Ishiro Honda, como “El vengador tóxico” o “La bestia de la noche amarilla”. Por no decir, que tenemos acceso al catálogo de las películas de The Asylum. Por este motivo, hoy me detendré en una de ellas, “El ataque del tiburón de las 3 cabezas”.
Sería la segunda entrega de la saga “Headed Shark Attack”. Una saga donde para cada nueva secuela se le añade una cabeza al tiburón. La historia no tiene pérdida, un grupo de adolescentes tiene que huir de las mortales mandíbulas de un gigantesco tiburón blanco de tres cabezas. Es una película socarrona y sin pretensión de ningún tipo, sencilla, simpática y sincera. Básicamente sigue la misma estructura y argumento que las predecesoras del género como “Anaconda”, “Komodo” o “Sharkanado”. Como si de una película slasher de los 80 se tratase, un pequeño grupo de jóvenes luchan por su vida ante el mal y la violencia encarnada en un tiburón.
El inicio de la película ya nos avisa a que hemos venido, vemos como el tiburón arrasa con todos los integrantes de una fiesta en la playa. En este sentido la película no engaña a nadie, como espectador sabes a lo que has venido y la película cumple completamente con las expectativas que mostraba ya en su título.
Todo esto no quita que sea mala, porque para que engañarnos es bastante mediocre y olvidable. Lo interesante de estas películas y de la saga en general es el cómo no se toman en serio nada de lo que ocurre, es una idea totalmente absurda y paródica para el puro entretenimiento. Tanto la saga de “Sharkanado” como cualquiera de las películas de The Asylum, recogen los tópicos de los subgéneros del cine de terror, como el slasher o el kaiju, retorciéndolos y exprimiéndolos hasta la exageración y la parodia. Todo resulta una excusa para ver como el monstruo devora uno por uno a todos los intregrantes del grupo.
Si la idea de un tiburón de tres cabezas resulta poco estimulante, los “héroes” de la película no son otros que Rob Van Dam -la antigua súper estrella de la WWE- junto a Danny Trejo, que en estos años se está convirtiendo en todo un icono de la serie b actual. El actor estadounidense nos brinda en esta ocasión el papel de un duro pero sensible guardacostas, en el que se tendrá que enfrentar en un combate a machete contra el tiburón, como si fuese una referencia a su interpretación más reconocida en la saga de “Machete” de Robert Rodriguez.
La aparición de Van Dam mejora la película ya solo por la sorpresa que es el ver a esta leyenda de la WWE huir de un tiburón de tres cabezas. Las películas de serie b de las antiguas estrellas de la WWE se están convertido en el universo cinematográfico extendido que nos merecemos.
Hemos llegado actualmente a un punto en el que podríamos hablar sobre la edad dorada del shark exploitation, con la proliferación de algunas sagas como “Sharknado”, “Mega shark” o “Headed Shark Attack”, y varias películas como “Jurassic Shark”, “Piranha Sharks” o “Megalodon”. En su mayoría, estas películas son telefilms de comedias de terror que mediante lo extravagante y lo bizarro de sus argumentos retuercen los tópicos del cine de terror hasta ridiculizarlos por completo.